Con motivo del día de la mujer trabajadora nos citamos con Isabel en nuestras nuevas oficinas, donde se la ve resuelta y feliz. Nuestra fundadora ha querido compartir hoy con nosotros su sueño, su vida, el comienzo y la lucha constante por un proyecto, Ysabel Mora.
1. Hace 40 años que comenzaste a arrojar luz a un proyecto que hoy por hoy es solvente y cuenta con un gran equipo humano detrás. ¿Cómo surgió la idea de crear una marca como Ysabel Mora? ¿Cómo fue el comienzo?
¡Ya hace 40 años! El comienzo fue duro, cómo cualquier comienzo. Pero este proyecto para mi era un sueño sin límite, una carrera de fondo. Y ciertamente, hoy se ha convertido en realidad. Soy una persona inquieta y con visión de futuro, y cuando surgió la idea de emprender con Ysabel Mora lo arriesgue todo, y con mucha ayuda, poco a poco formé la gran empresa que es hoy.
2. ¿Y qué dificultades encontraste como mujer trabajadora allá por finales de los años 70?
Bueno, la verdad es que yo he intentado no considerarlo dificultades, prefiero llamarlo inconvenientes. Ten en cuenta que cuando yo comencé el mundo era muy distinto a como es hoy, y claro, no era lo normal ver a una mujer viajando sola, negociando con proveedores. En aquel momento, aunque los artículos que diseñábamos eran femeninos, este sector era un mundo de hombres. Pero poco a poco, y con la ayuda de mi familia, conseguí hacerme un hueco en este sector empresarial.
3. Y en tu opinión, ¿Crees que ha evolucionado el papel de la mujer trabajadora en la sociedad?
Por supuesto que sí. Hoy en día la mujer tiene un papel muy importante en la sociedad, que hace unos años era imposible realizar. Las mujeres han sabido sacar esos dones y actitudes que llevan dentro, poniendo en práctica sus capacidades y demostrando una gran fuerza interna. La evolución en estos cuarenta años ha sido muy grande.
4. Con esfuerzo y trabajo continuo has conseguido convertir a Ysabel Mora en una marca de referencia. Habrás pasado momentos mejores y peores, ¿Con qué apoyo has contado?
Sin duda ha habido momentos más duros, pero encontrar el equilibrio siempre ha sido más fácil cuando tienes el apoyo de tu gente y tu familia. Con cariño todo se puede conseguir. Para mi ganaban las ganas de hacer realidad mi sueño, Ysabel Mora, y todos me han apoyado en esta aventura. Y luchando cada día, con esfuerzo, coraje y tesón se puede decir que lo hemos conseguido.
5. Isabel, gracias por tu tiempo, antes de despedirte te pedimos una última cosa: Un consejo para todas las mujeres trabajadoras.
Pues le diría a todas aquellas mujeres que tengan en cuenta que por sí ya son maravillosas, que jamás olviden la fuerza, el valor y el coraje que todas llevamos dentro. Con ilusión y luchando cada día por lo que quieres lo más significativo no es la meta que quieras alcanzar, si no que disfrutes cada día de todo lo que te rodea. Porque con esfuerzo eres capaz de todo, nunca te rindas. Persigue tu sueño.
Ysabel Mora y Tú 